Anteriormente la vida promedio de un enfermo con síndrome de Marfan era de 45 años pero, actualmente, con el avance de la cirugía cardiovascular, este promedio se ha elevado hasta los 65 años de edad; es decir, que viven un promedio normal.
Estos enfermos no necesitan una alimentación especial, aunque se aconseja que sigan una alimentación sana con frutas y verduras, evitando el exceso de carne roja.
Todos los enfermos reportados hasta la actualidad tienen un coeficiente intelectual normal o por encima de lo normal. Un afectado por este síndrome es capaz de estudiar y trabajar como cualquier otra persona.
El ejercicio y la actividad física son importantes para mantener una vida sana, mejorando la condición física, y ejerciendo una acción beneficiosa sobre la presión arterial y la calcificación de los huesos.