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Diagnóstico médico
Para diagnosticar la enfermedad de Cushing es necesario que el médico solicite un análisis de sangre y orina que incluyan la determinación de las hormonas corticotropina y cortisol. Se mide la secreción de hormonas en situación normal y después de la estimulación o inhibición de la secreción con fármacos.
Diagnóstico por imagen
Los exámenes radiológicos (tomografía [TAC]) y, sobre todo, la resonancia magnética (RM) de la hipófisis permiten observar la presencia de un adenoma, aunque muchas veces puede no llegarse a ver.