El paciente con rinitis alérgica debe tomar una serie de medidas para poder controlar su enfermedad como: identificar el alérgeno, retirar la exposición al mismo o disminuirla, tomar el tratamiento farmacológico que le prescriba el médico, proceder a la desensibilización de la sustancia cuando esto sea posible y/o aconsejable, y tomar medidas preventivas para que no se desencadene la crisis.
El polen se encuentra en el aire, en todas partes donde se encuentran árboles, pastos o maleza que están brotando y, por lo tanto, es difícil de evitar, pero se pueden tomar algunas medidas como permanecer en lugares cerrados con aire acondicionado en los momentos de mayor concentración de polen y no bajar las ventanillas del coche. Pero hay algunos casos en los que se puede disminuir el contacto con el polen. Si el paciente sufre alergia al polvo debería seguir estos consejos:
Consejos
- Forre las almohadas con cubiertas con cremallera a prueba de polvo o lávelas con agua caliente cada dos semanas.
- Forre el colchón con cubiertas con cremallera a prueba de polvo.
- Retire todo el alfombrado. De no ser posible, la solución se puede aplicar periódicamente a fin de inactivar las partículas que causan alergia al polvo.
- Evite las cortinas pesadas y las persianas, y lave las cortinas frecuentemente.
- Ponga muebles de madera o plástico en vez de muebles tapizados.
- Lave las mantas con agua caliente cada dos semanas. Evite las mantas de lana y de plumas. Las colchas se pueden forrar con cubiertas con cremallera a prueba de polvo.
- Los aires acondicionados pueden impedir el calor y la humedad elevadas que estimulan el crecimiento. Se pueden agregar filtros especiales para ayudar a atrapar las partículas alergénicas que haya en el aire. En los sótanos húmedos, use un deshumidificador.
- Cubra con filtros todas las ventanas de aire caliente o cierre las ventanas y demás recolectores de polvo.
- Limpie los cajones y los armarios con un trapo húmedo. Póngase una mascarilla cuando haga la cama y los quehaceres domésticos.