El tétanos es una enfermedad aguda, algunas veces mortal, que ataca el sistema nervioso central y que está causada por la toxina de la bacteria del tétanos, que suele entrar al cuerpo a través de una herida abierta. La bacteria del tétanos se desarrolla en tierra sucia y en lugares con estiércol, aunque también puede encontrarse en el intestino humano y en otros lugares.
Se contagia a individuos que han sufrido heridas punzantes que afectan tejidos profundos donde no hay oxigenación. En los países subdesarrollados, también se produce en la herida del cordón umbilical en los bebés recién nacidos.
Después de haber estado expuesto al tétanos, el enfermo presenta síntomas tras dos días a dos meses de incubación. En los bebés, el periodo de incubación es de entre cinco días y dos semanas.
Cada persona puede experimentar los síntomas de forma diferente, incluyendo:
- Rigidez de la mandíbula (también llamada trismo).
- Rigidez de los músculos abdominales y de la espalda.
- Contracción de los músculos faciales.
- Pulso rápido.
- Fiebre.
- Sudoración.
- Espasmo doloroso en los músculos cercanos al área de la herida (si afecta la laringe o la pared del pecho, puede causar asfixia).
- Dificultad para tragar.